Clitemnestra era la mujer de Agamenón, jefe de las tropas
griegas que van a la guerra de Troya. Cuando estaban de camino a Troya, 1000
barcos, estuvieron varios días sin aire, para poder navegar. Agamenón contrató
un adivino llamado Calcance, para saber que podrían hacer para tener aire y él,
le dijo que tenía que matar a su ser más querido, a su hija más hermosa, la
cual él llegó a la conclusión que ésta era Ifigenia, su hija menor.
Para poder llevar a su hija hasta él, hizo que fuera un
mensajero por tierra hasta Micenas para decirle a Clitemnestra que debían ir
hasta él para que su hija contrayera matrimonio con Aquiles, y así fue, ellas
fueron hasta Aulide por tierra. Ifigenia iba vestida de novia.
Cuando la iban a sacrificar, Artemis/Diana, bajó a un ciervo,
aunque todo el mundo pensaba que era Ifigenia y a ella se la llevó por el aire
y la convirtió en su sacerdotisa en uno de sus tiemplos. Clitemnestra no
perdonó este sacrificio y mientras Agamenón luchaba contra los troyanos se
convirtió en amante de Egisto.
Cuando Agamenón regresó a su patria, Clitemnestra, con la
ayuda de su amante le asesinó. Le preparó un baño y al salir le pusieron un
tipo de albornoz el cual no tenía extremidades por donde sacar la cabeza y las
manos, de ésta manera, cuando él estaba allí atrapado le mataron.
Habiendo matado a Agamenón y a Casandra (amante de
Agamenón), Clitemnestra era libre de casarse con Egisto, pero ella no sabía que
sus hijos tenían una venganza. Orestes, hijo de Clitemnestra y Agamenón,
terminó asesinando a su madre y a Egisto, el cual había colaborado con ella en
la muerte de su padre.
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